17 de agosto de 2009

Hay que saber callar tanto como hay que saber decir.
Saber darse tiempo como disfrutar el perderlo a gusto.
Entender lo que vive mejor tras las persianas o en el fondo de los cajones.
Pero existe y vive... y ahí está esperando el desempolve momentáneo, el vistazo sin miedo a lo que realmente se es.

Cada quien con sus rincones oscuros... innombrables nombres, irreconocibles rostros.
Se va el tiempo y no quedan huellas... el olvido lo borra todo.

Hay que saber decir... hay que encontrar donde.

1 comentario:

Pionero dijo...

La mirada mostrada, las palabras arrugadas, hay que saber callar, como tanto hay que saber decir, callamos la impureza, decimos los nobles actos del arlequin, sin duda dice, grita la poetiza frente a la corte, sin duda encontramos el escenario perfecto para decir, para encontrar la mirada mostrada en un par de horas, en un par de dias de espera.

Gracias por encontrar..!! Te amo